Nos encontramos ante una realización australiana de animación, concretamente dentro del género stopmotion este se caracteriza por ir creando una animación a través de capturas de personajes modelados en movimiento, más concretamente el subgénero al que pertenece el metraje es el Claymation ya que son personajes realizados con plastilina, es increíble como unos “aparentemente” descuidados personajes se puede transmitir tanto sentimiento, digo aparentemente porque pueden parecer de trazos llanos con unos rasgos faciales sencillos pero efectivos, ya solo el principio de la historia nos regala panorámicas de lo detallado y cuidado del mundo modelado en plastilina, el realizador Adam Elliot creador de la oscarizada “Harvey Krumpet” se ha superado con este film, puesto que nos regala una historia profunda, que hace gala una gran humanidad.
La historia parte de la situación de una niña australiana de los años 70, la cual se encuentra muy sola, ya que en el colegio es motivo de burlas y en su casa se encuentra desamparada, puesto que sus padres se preocupan más por sí mismo y sus descarriadas vidas que de ella, así pues con las continuas preguntas que todos nos hemos hecho en la infancia decide entablar al azar amistad por correspondencia con alguien llamado Max en los Estados Unidos, la casualidad hace que este personaje sea de lo más variopinto, pues es un hombre solitario de unos 40 años de edad con sobrepeso y una extraña afinidad con el chocolate, a medida que se desarrolla la historia Mary y Max congeniarán e irán madurando y aprendiendo el uno del otro.
Una vez metidos en harina descubriremos como los personajes poseen relaciones inestables ya bien sean a través de miedos, desconocimiento de la lógica del mundo o del tan temido amor, el cuál se nos muestra como un arma de doble filo, pues puede abrir las emociones más anheladas por el ser humano o toparnos con una puerta hacia el desazón y desesperación más indeseable, a través del nexo de las cartas los personajes irán descubriéndose el uno al otro y a la vez a sí mismo, desplegando en ellos ciertas habilidades de las cuales no creían poder desarrollar e irán replanteándose el camino de sus vidas.
El guión elaborado por el propio realizador de la película es extraordinario, en él se encierran ciertos aspectos de la cotidianidad tratados con un sentido del humor ingenioso y abrumador que provocarán la complicidad y la sensación en el espectador de seguridad hacia el clímax final de la historia.
Esta Mary and Max es una película notable, que llega a tocar la fibra e incluso podremos identificarnos con los muñecos de plastilina en más de una ocasión, ya que poseen sentimientos que son poco o nada segmentarios o artificiales, sino que son personas representadas de manera integral, puesto que la profundidad del guión los plasma en la historia como consecuencias de un todo del que forman parte, familia, escuela, las relaciones con sus iguales e incluso de las frustraciones sexuales por poner ejemplos son plasmados en la cinta, son muchos los aspectos que se tocan en esta pequeña gran obra maestra.
Como buena obra compleja podremos destacar el trabajo de todos sus elementos, así mencionaré el espléndido trabajo realizado en la banda sonora que enfatiza los momentos más dramáticos con unas elecciones muy acertadas de temas entre los cuales encontraremos una versión del clásico de Doris Day “Qué será”.
Otro pilar fundamental del que se vale el director es la fotografía, en sí está tomada desde el punto de vista de los sentimientos y las características de los personajes, así pues cuando nos encontremos desde el punto de vista de Mary, esta obtendrá una amplia gama de colores, propios de un punto de vista infantil y más acorde con la estética de la década de los setenta, a su vez se nos presenta una Nueva York, grisácea y lluviosa, fiel reflejo de la monotonía que siente la persona de Max, la cuál refleja la incapacidad y el hastío que produce en él la insensibilidad y la incomprensión de un mundo caótico y frenético.
La conclusión es que es una película maravillosa que nos hará reír y nos emocionaremos con los momentos más dramáticos, y además cuenta con calidad artística de sobra como para que la recordemos, sin lugar a dudas se merece un sitio de honor entre nuestras pelis favoritas.
DALE DURO !!!
ResponderEliminara ver cuanto dura...
EliminarPara empezar la estética del blog me parece un acierto, puesto que te involucras en una atmósfera cinéfila. Y que decirte de la entrada, me parece magnifica!!!!!!!! te felicito espero colaborar contigo. De nuevo felicidades!
ResponderEliminarMuchas gracias!! recojo el guante y espero que expandas el blog.
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